La seguridad del software abarca una variedad de prácticas, que incluyen la codificación segura, la modelización de amenazas, las pruebas de seguridad y las evaluaciones de vulnerabilidades. También implica el uso de cifrado, controles de acceso, mecanismos de autenticación y políticas de seguridad para proteger el software y los datos del usuario.
El objetivo principal de la seguridad del software es prevenir el acceso no autorizado, las violaciones de datos y los ciberataques. Las brechas de seguridad pueden tener consecuencias graves, como filtraciones de datos, pérdidas financieras y daños a la reputación de una organización. A medida que la tecnología evoluciona, los profesionales de seguridad del software deben adaptarse constantemente a nuevas amenazas y desarrollar soluciones de seguridad innovadoras para proteger eficazmente los sistemas de software.